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Ciberresiliencia vs. Ciberrecuperación: ¿Cuál es la diferencia?

En un entorno digital donde los ciberataques son cada vez más frecuentes y sofisticados, la protección de los datos y la continuidad del negocio se han convertido en prioridades absolutas. De hecho, en 2024, el 76 % de las organizaciones atacadas en Latinoamérica admitieron haber pagado un rescate, con pérdidas estimadas en 5 millones de dólares por incidente. Además, el costo del tiempo de inactividad para las grandes empresas puede superar los 16.000 dólares por minuto.

Para abordar esta creciente amenaza, ITS e Hitachi Vantara organizaron recientemente el webinar “Del Ransomware a la Recuperación: Construyendo Organizaciones Ciberresilientes”. Durante la sesión, se exploraron estrategias clave para fortalecer la seguridad de las organizaciones. Dos conceptos fundamentales que a menudo se confunden son la ciberresiliencia y la ciberrecuperación.

Aunque están relacionados, no son intercambiables. Comprender sus diferencias es crucial para construir una defensa robusta y completa. Este artículo resume los temas clave tratados en el webinar, definiendo ambos conceptos y explicando por qué su integración es vital para cualquier estrategia de ciberseguridad moderna.

¿Qué es la ciberresiliencia?

La ciberresiliencia es la capacidad de una organización para continuar operando y entregando su resultado previsto a pesar de sufrir un evento cibernético adverso. No se limita a reaccionar ante un ataque, sino que adopta un enfoque proactivo que abarca la anticipación, la resistencia y la adaptación rápida para minimizar el impacto en el negocio.

Una estrategia de ciberresiliencia se enfoca en mantener la continuidad del negocio en todo momento. Incluye no solo la protección contra ciberataques, sino también la preparación para otros tipos de incidentes como desastres naturales o cortes de energía que puedan afectar la infraestructura tecnológica.

Para mejorar la ciberresiliencia, las organizaciones implementan diversas estrategias, tales como:

  • Inteligencia de amenazas: Recopilar y analizar información sobre posibles amenazas para anticipar ataques.
  • Monitoreo proactivo: Supervisar continuamente los sistemas para detectar actividades anómalas antes de que se conviertan en incidentes graves.
  • Arquitectura de seguridad robusta: Diseñar una infraestructura tecnológica con múltiples capas de defensa para resistir ataques.
  • Pruebas de restauración: Ejecutar simulacros periódicos para validar los procesos de recuperación y asegurar que los backups son funcionales.

¿Qué es la ciberrecuperación?

La ciberrecuperación es un aspecto especializado de la ciberseguridad enfocado en restaurar datos y sistemas críticos a un estado funcional y seguro después de que un ciberataque ha ocurrido. Su naturaleza es inherentemente reactiva, activándose una vez que un incidente ha sido detectado.

A diferencia de los métodos tradicionales de backup, la ciberrecuperación está diseñada específicamente para hacer frente a amenazas modernas como el ransomware, que busca corromper o encriptar datos de manera maliciosa. Su objetivo principal es garantizar que la organización pueda volver a operar rápidamente y con la certeza de que los datos restaurados están limpios y libres de malware.

Los componentes clave de una estrategia de ciberrecuperación incluyen:

  • Soluciones de backup avanzadas: Creación de copias de seguridad en bóvedas seguras y aisladas (air-gapped), a menudo inmutables, para protegerlas contra alteraciones o eliminaciones por parte de los atacantes.
  • Planes de respuesta a incidentes: Procedimientos detallados que guían al equipo de TI a través de los pasos necesarios para contener la amenaza, evaluar el daño y comenzar la recuperación.
  • Análisis forense: Herramientas que analizan las copias de seguridad en busca de malware para asegurar que la restauración no reintroduzca la amenaza en el sistema.
  • Minimización del tiempo de inactividad (RTO): El objetivo es restaurar los sistemas críticos lo más rápido posible para reducir el impacto financiero y operativo del ataque.

Diferencias clave: Ciberresiliencia vs. Ciberrecuperación

CaracterísticaCiberresilienciaCiberrecuperación
EnfoqueContinuidad del negocio y capacidad de adaptación.Restauración de datos y sistemas tras un ataque.
AlcanceAmplio: incluye ciberataques, errores humanos, desastres naturales.Específico: centrado en la recuperación ante ataques maliciosos como el ransomware.
NaturalezaProactiva: anticipar, resistir y adaptarse.Reactiva: se activa después de que ocurre un incidente.
ObjetivoMinimizar la interrupción y mantener las operaciones.Restaurar sistemas a un estado limpio y conocido lo más rápido posible.
TimingContinuo: antes, durante y después del incidente.Post-incidente: se enfoca en el proceso de vuelta a la normalidad.

¿Por qué necesita ambas?

Adoptar una estrategia que solo se enfoque en la ciberresiliencia o la ciberrecuperación es insuficiente. Ambas son piezas cruciales de un rompecabezas de seguridad integral. La ciberresiliencia actúa como la primera línea de defensa, trabajando para prevenir y resistir ataques, minimizando su impacto si llegan a ocurrir. Su objetivo es que la organización siga funcionando incluso bajo presión.

Por otro lado, la ciberrecuperación es su plan de contingencia esencial. Asume que, a pesar de todas las medidas preventivas, un ataque puede tener éxito. En ese escenario, una estrategia de recuperación sólida asegura que puede restaurar sus datos y sistemas críticos de manera rápida y segura, garantizando así la supervivencia y continuidad del negocio a largo plazo.

Implementación de una estrategia combinada

Integrar la ciberresiliencia y la ciberrecuperación requiere un enfoque estructurado y holístico. Apoyarse en marcos de gobernanza reconocidos como NIST 2.0 (que abarca identificación, protección, detección, respuesta y recuperación) o ISO 27001 (centrado en la evaluación de riesgos y controles de seguridad) proporciona una base sólida.

Algunos pasos prácticos para implementar una estrategia combinada incluyen:

  • Realizar evaluaciones de riesgo periódicas: Identificar vulnerabilidades y amenazas para priorizar los esfuerzos de mitigación.
  • Capacitar a los empleados: Fomentar una cultura de seguridad donde cada miembro del equipo entienda su rol en la protección de la organización.
  • Realizar simulacros de ciberseguridad: Poner a prueba los planes de respuesta y recuperación para identificar debilidades y mejorar los tiempos de respuesta.
  • Adoptar tecnología adecuada: Invertir en soluciones que ofrezcan protección proactiva (resiliencia) y capacidades de recuperación avanzadas (recuperación), como las ofrecidas por Hitachi Vantara.

Hacia un futuro más seguro

En el panorama actual, la pregunta no es si una organización sufrirá un ciberataque, sino cuándo. La ciberresiliencia y la ciberrecuperación no son solo conceptos técnicos, sino pilares estratégicos que aseguran la supervivencia y prosperidad de una empresa en la era digital. Adoptar un enfoque dual, combinando la prevención proactiva con una planificación de recuperación robusta, es la única forma de construir una organización verdaderamente preparada para enfrentar los desafíos del mañana

Nuestro equipo de consultores expertos puede ayudarte a diseñar un roadmap de ciberseguridad adaptado a tu empresa. Contacta hoy a nuestros asesores y comienza a fortalecer tu organización frente a las amenazas digitales del futuro.

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